Primer viaje de estudio a Inglaterra - Enero de 2010

Desde el 23 de enero hasta el 10 de febrero tuvimos el gusto como institución de concretar nuestro primer viaje de estudio a Inglaterra. Fuimos cinco las viajeras: Ianara Sepero, Leonela Bazán, Betina Bechara Baladi, Claudia Rico y quien relata. 

 

¿Cuánto tiempo estuvieron? 

Estuvimos 2 semanas en Londres, y como extensión cultural, 3 días en Madrid. Fueron 19 días en total.

 

¿Dónde se alojaron?

En dos casas de familia que hospedan a alumnos que asisten a diversas escuelas. Las casas estaban ubicadas en una zona céntrica, muy cerca de las atracciones turísticas que ofrece la ciudad. Betina y Claudia se hospedaron con Todd y Jackie; mientras que con Ianara y Leonela nos alojamos con Jed y Linda. Las casas estaban a unos 350 metros una de la otra, a dos cuadras del emblemático río Támesis en el barrio de Putney. Además, teníamos muy cerca las paradas de ómnibus y de subte. 

 

¿Cómo era vivir con las familias inglesas?

Los ingleses son muy organizados, en todo aspecto. Las familias están acostumbradas a recibir alumnos extranjeros, y eso se nota. En nuestro caso, las dos familias anfitrionas eran totalmente distintas, pero ambas nos atendieron de maravilla y nos asesoraron en todo lo que necesitábamos saber. Inclusive Todd nos acompañó una tarde a "Kew Gardens" (el jardín botánico de Londres) para que pudiéramos ingresar como sus invitados. Fue un paseo precioso, que lo disfrutamos todas, muy especialmente Betina que es experta en el cuidado de las plantas. .

 

¿Por qué eligieron a Londres como destino principal?

En un principio íbamos a ir a Brighton, que es una ciudad más pequeña, muy pintoresca, sobre el mar. Pero luego consideramos incomparables las posibilidades que nos ofrece vivir un tiempito en una capital tan cosmopolita como Londres; allí el intercambio cultural es moneda corriente entre tanta diversidad racial, se valora más el inglés como lengua de intercambio mundial. No existe la pronunciación única: lo hablábamos con alemanes, japoneses, suecos, brasileños… cada uno con su fuerte acento, pero el inglés estaba allí y permitía que nos hiciéramos amigos. Creo que la riqueza de nuestro viaje fue mayor porque estábamos en una ciudad tan rica en cultura y en atracciones. Íbamos a la escuela a la mañana y salíamos a conocer un lugar distinto cada día: barrios de la ciudad, museos, bares famosos como Hard Rock, monumentos, ceremonias tradicionales como el cambio de guardia en el palacio de Buckingham, revolver y (¿por qué no?) comprar algo en las tiendas más famosas del mundo como Harrods… También el hecho de residir en Londres nos permitió disfrutar de dos comedias musicales espectaculares: “The Phantom of the Opera” y “Chicago”.  

   

¿Conocieron  otras ciudades?

En Inglaterra fuimos a Oxford, la ciudad universitaria por excelencia, junto con Cambridge. Además visitamos Bath  donde todavía hay recuerdos intactos de la conquista romana; Stratford-upon-Avon, donde nació Shakespeare; Brighton, emblema de la playa inglesa; Stonehenge, que todavía encierra el misterio sobre los primitivos habitantes de Europa.

Fuera de Inglaterra fuimos tres días a Madrid, donde pudimos apreciar el enorme contraste entre los dos países, sus capitales y la forma de ser de sus habitantes.

 

¿En qué colegio estudiaron?

Todas asistimos a "Frances King School of English", que tiene el reconocimiento del British Council. La institución consta de cuatro filiales, todas en el centro de Londres. Leonela, Ianara y Betina estaban en Gloucester Road, mientras que con Claudia asistimos a la sucursal de la calle Wetherby Gardens. Estaban a unos 400 metros una de la otra, y también muy cerca de varios museos y de Hyde Park, así que podíamos aprovechar para disfrutar de algo diferente cada día.  

 

¿Es importante tener un alto nivel de inglés?

El nivel de inglés no es relevante, porque siempre va a mejorar con una experiencia de este tipo; tal vez sea más importante el hecho de estar abiertos a otra cultura y a desarrollar la responsabilidad y autonomía en el aprendizaje. El nivel siempre va a elevarse, y casi sin esfuerzo. El interés está centrado en comunicarme con al ser humano que tengo enfrente y no en completar correctamente los ejercicios que debo hacer. Estos intercambios aumentan la confianza personal y nos impulsan a seguir perfeccionándonos.

 

¿Qué fue lo más destacable de la experiencia?

Fue una experiencia tan enriquecedora que es difícil elegir un solo aspecto, tanto  desde lo profesional como desde lo personal. Fue increíble conocer compañeros de lugares tan lejanos y diversos (Francia, Italia, Rusia, Tailandia, Japón, China, España, Irán y hasta de Brasil!)  Pudimos ver el idioma como medio indispensable de comunicación en un aula realmente cosmopolita. Y gracias a la tecnología disponible, podemos continuar el contacto con toda esa gente por e-mail o a través de las redes sociales.